Grande
Grande la noche que el mar esconde, misma ausencia de color, misma soledad. Grande es la noche que la luna aclara, mismo arrullo en el vaivén del agua blanqueada por la luna y mismo arrullo de la espuma que intenta salpicarla. Grande la soledad que este aire alocado de primavera y envuelto de recuerdos, se perfila junto a las sombras. Grande la herida que se aloja en la calma de las cosas y las precipita despacio, y nos condena a buscar los restos del naufragio. Y más grande la cura en la mirada pausada, en el rumor de las olas, en el requiebro de un pájaro, en los días que nos quedan para devolver abrazos. José A. González Correa